Naranjas

Mi planta de Naranja Lima de José Mauro Vasconcelos

mi planta de naranja lima

Mi planta de naranja lima es una novela del escritor brasileño y autodidacta José Mauro Vasconcelos, que durante el año 1968 -cuando salió a la venta su primera edición-, encabezó la lista de best-sellers. Esta obra llegó a ser traducida a 32 idiomas y publicada en 19 países convirtiéndose en la obra literaria portuguesa más leída. También su argumento fue adaptado como guión para telenovelas, para el cine y el teatro e incluso, como lectura para niños en la enseñanza primaria.

Es una gran historia muy tierna y de calado carácter autobiográfico cuya fuerza narrativa y sensibilidad enganchan al lector desde las primeras páginas.

En resumen, “Mi planta de Naranja-Lima” narra las experiencias de un niño de cinco años que desea ser poeta pero cuya inocencia se ve interrumpida y se ve obligado a hacerse adulto mucho antes de tiempo debido entre otras muchas cosas, a las circunstancias económicas de su familia. Este inteligente, travieso e imaginativo niño llamado Zezé, encuentra refugio a su tristeza en un amigo muy especial, un pequeño árbol de naranjo que halla cercano a su nueva vivienda y al que bautiza con el nombre de “Minguito”. Este naranjo se convierte en su mejor amigo y confidente a quien Zezé cuenta todos sus secretos y con quien deja volar su imaginación mientras se evade de su cruel realidad. Así Minguito, se convierte a lo largo de las páginas de esta novela, en un árbol de naranjas fantástico capaz de imitar a grandes actores de cine, correr, hablar, etc.

Este libro encierra multitud de frases célebres que alimentan la narración y nos invitan a la reflexión. En definitiva, la temática de esta novela es atemporal. Todos podemos identificarnos con todo o parte de las experiencias, las emociones y los sentimientos contrapuestos que siente su protagonista. Aquí radica la mayor parte de su éxito y lo importante de su mensaje. En su esencia, trata temas como la infidelidad, el amor más allá de los cánones de belleza, la muerte, la soledad, la pobreza, la inmigración y un largo etcétera.

De entre sus mejores frases, vamos a destacar algunas de ellas:

“El corazón de las personas debe ser muy grande para que quepan todos aquellos a los que quiere”.

“Mi mamá me ha enseñado que debemos compartir nuestra pobreza con quien es aún más pobre”.

“No espero nada. Así no me decepciono”.

“Matar no quiere decir que uno tome un revólver… y haga ¡bum! No es eso. Uno lo mata en el corazón. Va dejando de querer. Y un día la persona muere”.

“La vida sin ternura no vale gran cosa”.

“El pensamiento crece, crece y se hace cargo de toda nuestra cabeza y nuestro corazón. Vive en nuestros ojos y en todo lo que forma parte de nuestra vida”.