Naranjas

La Naranja de María Elena Walsh

La Naranja de María Elena Walsh

Hoy quiero presentarles para quienes no la conozcan a la señora María Elena Walsh.

Dice la wikipedia de ella que era escritora, poetiza, dramaturga, música, cantautora y compositora argentina que escribió más de 50 libros y publicó más de 20 discos. Pero para mí, esta mujer supuso la banda sonora de mi niñez y seguramente, la de mucho de vosotros sin saberlo, puesto que sus canciones han sido interpretadas y adaptadas por multitud de artistas dedicados al género infantil de todo el mundo.

Aunque no todo su repertorio estuvo dedicado a los más pequeños, sí fue este un terreno en el que María Elena Walsh alcanzó su máxima popularidad.

Fue una mujer comprometida con su tiempo, con los derechos sociales y las libertades, sus inquietudes ante las injusticias en estos temas, las plasmaba como nadie de forma muy subliminal en todas sus composiciones y muchas de sus letras para adultos fueron cantadas incluso por Mercedes Sosa o Joan Manuel Serrat trascendiendo fronteras.

Una de sus famosas canciones, cuyo estribillo no se me ha olvidado y repito desde que era muy pequeña, es la llamada “el Twist del Mono Liso” que cuenta la historia de un mono y una naranja “difícil de cazar”. Su famoso estribillo versa así: “la naranja se pasea de la sala al comedor, no me tires con cuchillo, tírame con tenedor”.

He aquí os transcribo la letra para que veáis la gran imaginación y la magia de su poesía para niños y disfrutéis con lo divertido y pegadizo de sus canciones:

Twist del Mono Liso:

¿Saben, saben lo que hizo
el famoso Mono Liso?
A la orilla de una zanja
cazó viva una naranja:
¡Qué coraje, qué valor!
Aunque se olvidó el cuchillo
en el dulce de membrillo,
la cazó con tenedor.

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.

A la hora de la cena
la naranja le dio pena.
Fue tan bueno Mono Liso
que de postre no la quiso.

El valiente cazador
ordenó a su comitiva
que se la guardaran viva
en el refrigerador.

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.

Mono Liso en la cocina,
con una paciencia china,
la domaba día a día:
la naranja no aprendía.
Mono Liso, con rigor,
al fin la empujó un poquito,
y dio su primer pasito
la naranja, sin error.

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.

La naranja, Mono Liso
la mostraba por el piso.
Otras veces, de visita,
la llevaba en su jaulita.
Pero un día entró un ladrón.
¿Se imaginan lo que hizo?
El valiente Mono Liso
dijo:
-¡Ay, qué papelón!

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.

A la corte del Rey Bobo
fue a quejarse por el robo.
Mentiroso, el rey promete
que la tiene el Gran Bonete.

Porque sí, con frenesí,
de repente dice el Mono:
-¡Allí está, detrás del trono,
la naranja que perdí!

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.

Y la reina sin permiso
del valiente Mono Liso
escondió en una sopera
la naranja paseandera.

Mono Liso la salvó,
pero a fuerza de tapioca
la naranja estaba loca
y este cuento se acabó.

La naranja se pasea
de la sala al comedor.
No me tires con cuchillo
tírame con tenedor.